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El Wifi es la forma más sencilla y cómoda de conectarnos a Internet. Gracias a él podemos olvidarnos de los cables por completo y, si nuestro router lo permite, conectar decenas de dispositivos al mismo tiempo prácticamente con la misma velocidad que tendríamos si lo conectáramos por cable. Sin embargo, el Wi-Fi, a pesar de tener sus ventajas, también tiene inconvenientes. Y uno de los más molestos es la falta de cobertura, o señal, cuando intentamos cubrir una casa u oficina muy grande.
Factores que afectan negativamente al Wifi
La señal del Wi-Fi puede verse afectada por una gran cantidad de elementos. Uno de los principales es la distancia. Cuando estamos cerca del router, la velocidad es excelente. Sin embargo, a medida que nos vamos alejando, esta disminuye considerablemente. Sobre todo si ponemos paredes de por medio.
Además, cuanto mayor es el número de dispositivos conectados al mismo tiempo, mayor es la probabilidad de que todos ellos interfieran entre si, teniendo problemas de señal y velocidad. Si a nuestro alrededor hay más routers, las redes Wi-Fi pueden interferir entre sí, sobe todo en la red de 2.4 GHz, por lo que tendremos aún más problemas de señal y velocidad.
Y, por supuesto, hay otros elementos que pueden interferir igualmente en el rendimiento de la red Wi-Fi, por ejemplo, dispositivos electrónicos (microondas, monitores de bebé, etc) que también introducen ruido en las señales Wi-Fi y hacen que perdamos calidad y velocidad.
Pero todos estos problemas tienen solución, y con unos pequeños trucos caseros vamos a poder recibir mejor la señal del Wi-Fi en nuestros ordenadores y móviles.
Ampliar la señal WiFi con sencillos pasos
¿Qué puedo hacer si necesito aumentar el Wifi? Esta es una pregunta que todos nos hemos hecho alguna vez. Y cuanta más velocidad nos ofrece nuestro operador, más buscamos poder aprovecharla al máximo. Y, por supuesto, más complicado es mantenerla a largas distancias.
No existe un truco mágico que nos permita obtener una señal Wi-Fi perfecta. La calidad y velocidad de la misma depende de muchos factores. Sin embargo, lo que sí podemos hacer es llevar a cabo unas buenas prácticas que nos ayudarán a mejorar nuestra señal y tener mejor Internet sin cables.
Cambiar el router de sitio
Lo normal es tener el router, o bien a la entrada, o en el salón. Y seguro que lo hemos puesto de tal forma que no se vea. Y este es el primer error. Tanto si lo hemos metido dentro de una caja o un armario, como detrás de la tele, todo eso hace que la señal del Wi-Fi no salga directamente y es aquí cuando empiezan los problemas.
Debemos colocar el router en un sitio abierto para que la señal pueda fluir sin impedimentos. Y, si nuestro router tiene antenas, moverlas para que puedan captar la señal del mayor número de puntos posible.
El papel de plata, o colocar las antenas con un transportador de ángulos a una determinada medida para mejorar la señal son mitos.
Cambiar el canal del Wi-Fi
Otra de las razones por las que puede estar funcionando mal Internet es por tener configurado un canal incorrecto. Antes de nada decir que no hay canales malos o buenos, sino que los hay más saturados o menos saturados. Si todos nuestros vecinos están usando, por ejemplo, el canal 1, entonces este canal está saturado.
Desde la configuración del router tendremos que probar otro canal más libre, por ejemplo, el 10, para evitar tener problemas. Algunos routers tienen la opción de elegir automáticamente el canal que queremos usar. En ese caso debemos despreocuparnos, ya que él mismo buscará y cambiará el canal según su estado.
Cambiar entre la red de 2.4 GHz y WiFi 5
Los routers de hoy en día tienen dos tipos de redes diferentes. Por un lado tenemos la antigua red de 2.4 GHz, mientras que por otro tenemos la red mejorada de 5 GHz. Incluso hay algunos modelos que empiezan a emitir en WiFi 6, aunque esto aún está muy verde.
La red de 2.4 GHz es la más compatible con todo tipo de dispositivos, y la que mejor llega a todos los puntos de la casa. Sin embargo, es la más lenta, y su velocidad máxima teórica no llega a los 100 Mbps. Por otro lago, la red de 5 GHz es ideal para exprimir la velocidad de las conexiones de fibra óptica, pero, sin embargo, pierde mucha más señal según nos vamos alejando.
Tenemos que elegir, o bien tener mejor cobertura gracias a la red de 2.4 GHz, o más velocidad, siempre que estemos cerca del router, con la red de 5 GHz.
¿Tengo un router viejo? Actualiza
La tecnología de los routers evoluciona constantemente. Por lo tanto, si aún tenemos un router muy antiguo, puede que este sea el problema por el que tenemos mala señal de Wi-Fi en casa. Por lo tanto, debemos pensar, o bien en pedir un router nuevo a nuestra compañía, o comprar nosotros nuestro propio router.
Sea de la manera que sea, un router Wi-Fi ya preparado para la red de 5 GHz, e incluso con soporte para montar una red de malla nos ayudará a que nuestra casa, u oficina, tenga mejor Internet.
Monta un Wi-Fi Mesh, o de malla
Si lo que queremos es llevar Internet a todas las habitaciones de la casa, otro de los trucos a los que podemos recurrir es a montar nuestra propia red Mesh, o de malla. Colocando un amplificador Wifi con Mesh en cada uno de los puntos de la casa donde queremos repetir y mejorar la señal podremos tener una red perfecta que nos permita estar siempre conectados, y además cambiar de un punto de acceso a otro, mientras nos movemos, de forma automática y sin cortes.
PLC: una alternativa para ampliar el Wi-Fi
Además de instalar repetidores Wi-Fi, o montar una red Wi-Fi Mesh, otra técnica a la que podemos recurrir para aumentar la señal del Wi-Fi en casa o en la oficina es comprar un PLC.
El PLC, o Power Line Communications, es un dispositivo que nos permite codificar la señal de Internet y enviarla hasta otro punto de la casa a través de la red eléctrica.
Las ventajas del PLC frente a los repetidores de señal son considerables. La más importante es que podemos llevar el Internet mucho más lejos y, en la gama alta, incluso a máxima velocidad. Mientras que por Wi-Fi es complicado conseguir, por ejemplo, 600 Mbps, con el PLC podemos obtener esta velocidad sin problemas.
Conectar dos, o más, PLC en casa es una tarea muy sencilla. Lo único que debemos hacer es conectar el principal junto al router, conectarlo a él mediante un cable de red y listo. Luego, en cada punto donde queremos tener Internet bastará con conectar otro PLC y estos se conectarán entre sí sin tener que hacer nada más.
Existen PLC con WiFi Mesh. Esto significa que cada una de las unidades puede funcionar como un punto de acceso independiente, por lo que podremos cubrir fácilmente la cobertura de toda la casa sin tener que comprar luego otros repetidores. Y al estar todos conectados por la red eléctrica, la estabilidad y velocidad serán excelentes.
Como inconvenientes, destacar que, aunque podemos comprar una pareja de dispositivos por 20 euros, si realmente queremos una buena velocidad y estabilidad tenemos que ir a la gama alta. Y esta es más cara que, por ejemplo, un repetidor Wi-Fi Mesh. También hay que tener en cuenta que depende mucho de la calidad de la red eléctrica. Si tenemos una instalación muy vieja, o problemas de red, entonces perderemos mucha velocidad e intensidad, y puede que el Internet no funcione del todo bien.
