El 14 de marzo de 2020 se proclamaban por primera vez en España medidas de confinamiento por el impacto del coronavirus llegado de China. Una emergencia sanitaria que obligó a muchos trabajadores a adaptarse a una nueva realidad: la de tener que iniciar sus tareas diarias desde el ordenador de casa en vez del de la oficina. Esa adopción masiva de tecnologías de la información llevó a que también la actividad de los ciberdelincuentes creciera, conocedores de que muchos de los recién estrenados puestos de teletrabajo no estaban preparados para llevarse a cabo con las mínimas garantías de seguridad. Por lo que, del mismo modo que las videollamadas, o los documentos colaborativos, entraron en escena la VPN. ¿Sabes qué ventajas tienen y porque deberías teletrabajar conectado a una?
¿Qué es una VPN?
VPN son las siglas de Virtual Private Network y significa algo así como red virtual privada. Simplificando mucho, se trata de un tipo de conexión que debemos realizar para encriptar toda nuestra información y mantener una comunicación directa con el servidor, en este caso, de nuestra empresa. Esta conexión nos permite navegar ocultando nuestra identidad y, muy importante, lejos de la mirada de los ciberdelincuentes que buscan a sus víctimas en el mar abierto, es decir, en medio de las procelosas aguas de una "world wide web" en la que nuestra conexión a través del router de casa no se realiza con las mismas medidas de seguridad.
Este tipo de conexiones se utilizaban antes de la pandemia para, por ejemplo, acceder a contenidos o plataformas con limitaciones de consumo regional. Por ejemplo, en los meses en los que Disney+ no estuvo disponible en España, muchos usuarios adquirieron servicios de VPN para hacerse pasar por internatuas estadounidenses que, ya sí, podían acceder al servicio y disfrutar de sus películas, series, etc. Fue a partir de la pandemia, con las empresas trabajando a distancia con sus empleados, cuando se disparó la necesidad de estas VPN corporativas que nos facilitan seguir trabajando desde casa como si estuviéramos en la oficina. Presencialmente.
En estas VPN de empresa no solo conseguimos unos niveles máximas de seguridad por el cifrado de las comunicaciones sino que, además, tenemos acceso directo a la red interna para seguir trabajando y accediendo a los ficheros como si estuviéramos dentro de sus instalaciones. Si cuando utilizamos el PC del trabajo tenemos una red local (blindada del exterior) que guarda nuestros trabajos, documentos y archivos, gracias a la VPN es posible mantener ese sistema de trabajo y garantizarnos el acceso manteniendo los mismos niveles de seguridad, sin miedo al ataque de los ciberdelincuentes.
¿Cómo funciona una VPN?
Una VPN empresarial es, en realidad, un enlace privado que se sitúa entre nuestra conexión domésticas y los servidores de la empresa que nos granjean el acceso a través de unas credenciales que pueden ser, simplemente, las de un usuario y una contraseña, o un certificado digital expedido por la compañía y que solo permite a nuestro ordenador conectarse al sistema. En ambos casos, la información que circula entre ambos extremos está cifrada y queda fuera de la vista de los hackers, gobiernos, ISP y demás actores online que puedan estaer interesados en cotillear nuestras comunicaciones, o hacerse con archivos y documentos que manejamos a diario.
Además, las VPN destinadas al teletrabajo son una herramienta muy fácil de utilizar porque se trata de simples programas que se instalan en el ordenador y que, a través de un doble clic, ejecutan un script que conecta el ordenador a esa red privada. Cuando la conexión se ha establecido, solo tendremos que demostrar ante el sistema que somos nosotros, bien introduciendo nuestro usuario y contraseña corporativo (los mismos que usamos en los ordenadores de la oficina), bien instalando un certificado, o bien la suma de los dos. En este último caso, la seguridad del sistema sería prácticamente total.
¿Cuáles son los beneficios de teletrabajar con VPN?
La gran ventaja de teletrabajar con una VPN corporativa es que mantenemos la conexión con los servidores de la empresa de tal forma que, aun estando en casa, podemos acceder a todo el sistema de archivos de la red local. Esto significa que podremos recuperar todos nuestros documentos almacenados, modificar remotamente cualquiera que necesitemos y mantener el flujo de trabajo con el resto de compañeros, ya que estaremos accediendo a los recursos de la compañía prácticamente del mismo modo que si lo hiciéramos de forma presencial en la oficina. Eso agiliza enormemente la productividad de los departamentos y hace que, prácticamente, no haya diferencia entre estar en casa o en la sede de la compañía.