Hace poco más de 25 años, las clases en los colegios e institutos se impartían a "la vieja usanza". Es decir, los profesores sacaban el libro, indicaban la página por la que todos iban a comenzar ese día la lección y esta se daba de forma monótona y repetitiva. Tal vez, de vez en cuando, una de las asignaturas alcanzaba para encender el ordenador del aula de informática para experimentar con esos conocimientos interactivos y multimedia que se pusieron de moda en la década de los 90 del siglo pasado al calor de la llegada de los famosos CD-ROM. Por suerte, ahora, los profesores conectan mejor con sus alumnos gracias a herramientas como Kahoot.
Y es que el abanico de posibilidades tecnológicas han evolucionado tanto que han convertido las clases de un colegio, o un instituto, en el lugar perfecto donde afianzar los conocimientos a través de todo tipo de herramientas informáticas. Cada vez es más común dejar los libros de papel en la cartera para utilizar solo los del tablet, o enviar los deberes a través del correo electrónico a la plataforma escolar y, por supuesto, seguir el desarrollo de las clases desde casa gracias a unas videoconferencias que la pandemia de coronavirus ha impulsado como nunca antes.
¿Qué es Kahoot y cómo funciona?
Pero dentro de ese escenario digital y virtual que se ha abierto en los centros docentes de España, hay una palabra que viene a convertirse en la punta de lanza de esa "new age" que se avecina alrededor de las plataformas online y los dispositivos móviles como smartphones y tablets. Un recurso que pueden utilizar los profesores para afianzar el conocimiento de sus alumnos e incentivar el trabajo en equipo, el ánimo por ser cada día un poco mejores y, por qué no, inculcarles desde muy pequeños los beneficios que tiene la tecnología en nuestro día a día.
Ese recurso tiene un nombre divertido, se llama Kahoot y, resumiendo mucho, son pequeñas aplicaciones con formato test que invitan a los alumnos a competir por conocer quién de ellos se sabe mejor la lección. Una plataforma en la que cualquier profesor puede crearse una cuenta y comenzar a diseñar nuevos Kahoot que puedan servir para afianzar los conocimientos a través de un concurso de preguntas tipo test que, con cada acierto que conseguimos, nos impulsa hacia lo más alto del podio de vencedores.
Los profesores pueden acceder a la página oficial de Kahoot para crear hasta cuatro tipos diferentes de contenidos: por un lado los que ya os hemos explicado de preguntas y respuestas, como si fuera una "quiz app" de las que proliferan en las tiendas para móviles iOS y Android; por otro aquellas en las que se solicitan una serie de respuestas distintas con la idea de generar posteriormente debates en clase; refuerzo de conocimientos gracias a una serie de preguntas tipo test muy sencillas; o simplemente como entretenimiento para hacer ver a los alumnos que cualquier asignatura puede ser divertida.
Aprende a crear un Kahoot
Lo primero que hay que decir es que pueden tener cuenta en Kahoot tanto los profesores como los alumnos ya que al iniciar el proceso de registro la plataforma nos pregunta sobre ello. Es más, incluso dependiendo del nivel educativo en el que nos encontremos, así nos irá invitando a generar ciertos tipos de contenidos. Es decir, para los alumnos más jóvenes nos recomiendan pequeños concursos de preguntas y respuestas así como cierto tipo de encuestas o herramientas de creación de debates.
Así que nos disponemos a crear nuestro primer Kahoot y lo hacemos centrándonos en un "quiz" de preguntas y respuestas. En él podremos definir el diseño de cada cuestión, como si se tratara de una presentación de Power Point ya que será posible hasta importar "slides" que ya tengamos creadas con otro programa. Ese "quiz" constará de una pregunta y varias respuestas donde a la derecha tendremos que indicar a la aplicación cuál es la correcta (haciendo clic en el círculo).
Según la dificultad de la pregunta podremos recompensar a los alumnos con una cantidad diferente de puntos así como marcar un límite máximo de tiempo para responder correctamente. Por último, es posible dar la opción de que los chavales puedan contestar a una sola de las cuatro respuestas o a varias, dependiendo del objetivo que nos hayamos marcado con el Kahoot. Ni qué decir tiene que una vez creado el juego, ganará el alumno que consiga una mayor cantidad de puntos, cosa que todos los demás conocerán ya que este tipo de contenidos funcionan de manera conectada entre todos los participantes. Como si fuera un juego multijugador.
Conectar con tus alumnos a través de juegos
Cuando el profesor tiene su Kahoot ya diseñado, se genera un número PIN que es el que los alumnos deben introducir, bien en la página web oficial, o bien dentro de las aplicaciones para teléfonos móviles que hay disponible, y que agilizan enormemente este tipo de contenidos. Tanto que, en el momento de ejecutarlos, no habrá prácticamente diferencias con cualquier otro juego de preguntas y respuestas de los que hay en las tiendas online de Apple y Google.
Es aquí, precisamente, donde radica el éxito y el atractivo de estos Kahoot, en los que el profesor puede colar sibilinamente conocimientos que serían terriblemente aburridos de dar con el libro abierto en clase, pero que sin embargo se transforman en una actividad amena y divertida donde no solo entran en juego los conocimientos de los chavales, sino también sus ansias por ganar, recolectar puntos y ser los primeros en el podio que la aplicación muestra al final del Kahoot.
Además, otra de las ventajas que ofrece esta plataforma es que el profesor tiene, pormenorizadamente, todos los datos de actividad de su Kahoot, de tal manera que puede comprobar, prácticamente en tiempo real, cómo va avanzando el conocimiento general de la clase: en qué punto han fallado más sus alumnos, dónde parece que lo tienen todo más claro e incluso si el nivel general está en el punto que esperaba a esas alturas del año lectivo.
Tipos de Kahoot más habituales
Kahoot es una plataforma que permite a los profesores crear cuestionarios de preguntas y respuestas muy sencillos en su modalidad gratuita de uso. Si desde el colegio, o el propio profesor, quiere ir un paso más allá, se ofrecen otras alternativas de pago que amplían ese abanico de posibilidades. Obviamente, a día de hoy, los más habituales son los "quiz" de preguntas y respuestas y su temática es tan diversa como asignaturas y profesores tienen cuenta en la plataforma.
Tanto es así que, con mucha diferencia, destacan los que se refieren a las matemáticas, cultura general, historia, idiomas y vocabulario, etc., con juegos mentales que hacen las delicias de los usuarios de la plataforma. En este punto hay que diferenciar entre los contenidos que crea un profesor para sus alumnos y los que la comunidad Kahoot va poniendo a disposición de los demás usuarios en la página oficial, con partners que van desde National Geographic a Disney, o Microsoft y Google dentro de sus programas educativos que han convertido a esta plataforma en un auténtico referente en los últimos meses.