Poco a poco, se va a acercando el día. Casi podemos escuchar esa cancioncilla de los niños de San Ildefonso que dice: “¡cuatro milloneees de eeeeurooos!”. Cada año soñamos con escuchar nuestro número junto a esta coletilla. ¿Estamos siendo realistas? En definitiva, a alguien le tiene que tocar, ¿verdad?. Pero, ¿sabes cuál es la probabilidad real de que nos toque la lotería de navidad? Analizamos todas las posibilidades y te damos una respuesta, a continuación.
¿Cuál es la probabilidad de que te toque la lotería?
Aunque no es uno de los sorteos que más dinero reparte, la Lotería de Navidad se caracteriza por ser la tradición que da el pistoletazo de salida a las festividades. Compramos décimos con la familia, compañeros de trabajo y amigos, en definitiva, compartimos la ilusión. Pero desgraciadamente, las probabilidades de que nos toque la lotería no son para nada altas.
Debemos tener en cuenta que todos los años se introducen 100.000 bolas de números dentro del bombo principal situado en el escenario del Teatro Real de Madrid. Por lo que, si solamente jugásemos un décimo, nuestra probabilidad de que nos tocase El Gordo sería del 0,00001%, o lo que es lo mismo: de uno entre 100.000. Pero este sorteo, además de El Gordo, reparte un total de 13.334 premios, por lo que las probabilidades de llevarte un pellizco aumentan a un 9% si incluimos los reintegros.
Muchos se dejan guiar por las apariencias de los números. Todos hemos escuchado eso de "ese no, que es muy feo", cuando en la realidad la estadística nos dice que todos tienen las mismas posibilidades. Aunque si miramos a los números premiados durante la historia, nos encontramos que existen terminaciones que han sido mucho más agraciadas que otras. Por ejemplo, El Gordo ha terminado en 5 en más de 30 ocasiones, seguido del 4 y el 6 empatados con 27.
Pero no todos los números son escogidos al azar, hay quien prefiere comprar números que correspondan a fechas importantes. Este año, por ejemplo, se ha pedido mucho el 19921 que corresponde al día en el volcán de Cumbre Vieja entró en erupción. O siendo un poco más sarcásticos, el 14320 el día que se comenzó el confinamiento.
¿Es mejor jugar al mismo número o variar?
Muchos tenemos la sensación de que, si nos mantenemos fieles a un mismo número, este no tendrá más remedio que salir en algún momento. Con lo que no contamos, es que cada año el contador vuelve a ponerse a cero, y la posibilidad de que salga nuestro número seguirá siendo la misma: 0,00001%. Algunos participantes prefieren abonarse a un mismo número, simplemente por el hecho de que, en caso de salir premiado algún día, no sientan rabia al ver que alguna vez jugaron a ese número y no les tocó.
¿Dónde ha caído más veces El Gordo?
Seguramente te venga a la cabeza todas esas celebraciones casi anuales a las puertas de Doña Manolita o La Bruixa D'Or. Quizá pienses que son dos administraciones que tienen una suerte infinita, que hace que todos los años les toque repartir algún número de los premiados. Es por eso que la gente hace colas de horas y horas para comprar un décimo en estas administraciones.
Desgraciadamente, mucho nos tememos que nada tiene que ver ocn la suerte. Ya que son dos administraciones que venden cerca de 10.000 números diferentes de cada sorteo, esto hace que sus probabilidades de resultar premiados, sean bastante elevadas. No es comparable a una administración de un pequeño pueblo que solamente tiene 2 números diferentes. Pero dejando esto de lado, los lugares con más suerte de la geografía española son: Sevilla (17), Bilbao (14), Valencia (13) y Zaragoza (13). Ya sabéis dónde ir en vuestras próximas vacaciones... ¡y no olvidéis comprar lotería!
Y si me tocase... ¿cuánto dinero cobraría?
La estadística nos dice que tenemos muy pocas posibilidades, pero... a alguien le tiene que tocar. ¿Y si te tocase a ti? Pasada la euforía de ver tu número en la pantalla y cobres tu premio, te darás cuenta que esos 400.000€ se convertirán en algo menos. Y es que Hacienda se quedará con 72.000€ del Gordo y con 17.000€ y 2.000€ del tercero y segundo respectivamente. Toque lo que toque, bienvenido será.
